porque no está mal que terminen las historias mientras haya historias que contar

21.1.14

Tormenta

Hace mucho calor, en el colectivo las chicas en mini-short transpiran los asientos y al bajarse, para secar la vergüenza, arrastran el short, sumamente pegado a su cuerpo. A los gordos les caen gotas en la cara, las que tratan de eliminar con sus dedos, disimuladamente, como si el resto de las personas no les vieran la cara brillosa y las otras gotas que están en el abismo del pelo, a punto de caer y ser asesinadas por esas extremidades gordas y también, transpiradas. Las viejas más chetas se tiran aire con un abanico antiguo pero distinguido, mientras que las pasadas-de-adultas con otro poder adquisitivo se airean con un folleto arrugado. Cuánto más calor hace, más torpe parece ponerse la gente, más roces innecesarios se generan, más apretado se ve el colectivo. Los que están adentro hace mucho que no miran para afuera, pero recuerdan un cielo encandilante y una atmósfera densa y pesada.

De repente, llueve. Así como si hace media hora el sol no hubiera copado todos los sentidos. Como si las nubes hubieran entrado sigilosa y lentamente por algún costado del cielo, porque nunca se percibió el momento de transición. Entonces, al revés: como si de un segundo al otro, hubieran aparecido nubes. Pero eso tampoco, nunca pasó. La única certeza es que de repente hay nubes. Y un par de gotitas, chiquitas. Y algunas más, y un poco más fuertes. Y de repente se huele lluvia, se ve lluvia, se escucha lluvia, se toca lluvia, se toma lluvia. Los 5 sentidos, ahora, están pasados por agua. Lluvia, nivel: tormenta. Lluvia, nivel: me resigno a mojarme sí o sí porque no hay manera de zafar. Lluvia, nivel: tengo miedo de que se me arruine lo que tengo en la mochila. Lluvia, nivel: no entiendo la gente que espera en un techo a que "pare de llover", ¿y si no para?

Lluvia. Lluvia, nivel: siento que no va a terminar. Lluvia, nivel: no te quiero ver nunca más en la vida y ya ni me acuerdo cómo se sentía cuando había sol y nos gustaba transpirar juntos.